Concluía ayer Domingo de Resurrección la Semana Santa,
marcada profundamente por las condiciones meteorológicas como bien apuntábamos
en el artículo anterior.
Abríamos la Semana el pasado domingo de Ramos, donde Ntro
Padre Jesús en su Entrada triunfal en Jerusalén y popularmente conocida como
“La borriquita”, no pudo efectuar su estación de penitencia debido a la lluvia,
no pudimos ver por nuestras calles el nuevo trono a costal que este año
estrenaba. Sin embargo por la tarde noche la cofradía de la Santa Veracruz y
caridad si pudo procesionar a sus titulares, Ntro. Padre Jesús a la columna y
Mª Stma de la Sangre aunque desapacible con viento y un poco de fresco la lluvia tan solo desprendió unas
gotas sin más importancia permitiendo al menos que los ruteños disfrutásemos
del desfile en nuestras calles.
El martes Santo apenas el Stmo Cristo de la Misericordia
asomaba por las puertas de San Francisco de Asís comenzaba de nuevo a llover,
por lo que el paso tuvo que ser de nuevo resguardado en la parroquia. El
miércoles sin embargo Ntro. Padre Jesús de la rosa y Mª Stma del Mayor Dolor si
comenzaron su recorrido pero llegando el Señor a lo alto de la C/Nueva
comenzaba un intenso chaparrón lo cual obligaba a suspender la procesión.
El jueves Santo si pudimos disfrutar de Ntro. Padre Jesús de
la humildad y la Soledad de Ntra Sra., que efectuaron todo su itinerario sin
incidentes, destacar el detalle de ambas imágenes a su paso por la parroquia de
San Francisco de Asís.
El Viernes Santo, tanto Jesús Nazareno la Virgen de los
Dolores y por la tarde el Santo entierro efectuaron un recorrido recortado en
ciertos tramos, ya que intermitentes chubascos amenazaban con precipitar con más
intensidad, que es exactamente lo que ocurría cuando tocaba el turno de la
Salida procesional de Ntra. Sra. de la Soledad, noche cerrada en lluvia intensa
que dejo a la Sagrada Imagen a resguardo de su Ermita Santuario.
El domingo de Resurrección tampoco pudo ser, a la hora de la
salida procesional del Resucitado también llovía con intensidad, dejando a la
imagen por primera vez desde la constitución de su cofradía sin salir a
desfilar por las calles ruteñas.